miércoles, 28 de diciembre de 2011

Sicilia y sus auténticos productos: frutas, quesos y aceites

Típicos productos agrícolas y alimentarios sicilianos, aún se cultivan o producen con métodos tradicionales. Algunos, distinguidos con certificación DOP.

Qué es la certificación DOP
La sigla DOP significa denominación de origen protegida, reglamentada por la Comunidad Europea. Es un reconocimiento que se otorga a productos agrícolas o alimentarios que se realicen en un área geográfica limitada y bajo determinadas normas de producción. Los productos deben ser obtenidos con métodos tradicionales y con materias primas del territorio delimitado. Las características del producto están ligadas estrechamente a las particularidades geológicas, agronómicas y climáticas del lugar.

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El chocolate de Módica

Chocolate de Módica
En la ciudad de Módica, en el sur de Sicilia, continuando con la tradición azteca, se elabora el chocolate solo con cacao, azúcar y especias.
Contrariamente a lo sucedido en el resto de Europa, el chocolate modicano nunca llegó a la elaboración industrial, manteniendo a lo largo de los siglos su pureza y su calidad de genuino.

Origen mítico del chocolate
Cuando “Quetzalcoatl”, dios del chocolate, llegó a la Tierra, traía del paraíso una planta de cacao que cultivó en su jardín y regaló a los habitantes del lugar. Estos aprendieron pronto a moler las semillas para preparar una pasta densa y nutriente.

Historia del chocolate
Cuenta la historia que el conquistador español Hernán Cortés vio por primera vez el cacao cuando se encontró con Montezuma en la corte de los aztecas en México. Entre los tesoros de oro y esmeraldas se encontraban miles de semillas de cacao que eran consideradas mercadería de cambio, a la par del oro y las piedras preciosas.
De las semillas de cacao los aztecas preparaban una bebida que era consumida solo por sacerdotes y nobles, proporcionando vigor y energía. Esta fue la bebida que le gustó tanto a Cortés que la introdujo en España y con el pasar del tiempo se transformó en una de las bebidas más apreciadas de Europa: el chocolate caliente.

El cacao en Sicilia
El cacao fue introducido en la isla durante la dominación española en el siglo XV. En ese momento Módica era el condado más grande del Reino de Sicilia por la extensión de su territorio, sus riquezas económicas y su gran patrimonio de arte barroco.

Elaboración del chocolate
Para su preparación los aztecas partían de una pasta de semillas de cacao trituradas en una piedra curva llamada “metate”. Esta piedra era calentada a fuego de leña y sobre ella se molía el grano con un martillo también de piedra.
A esta pasta amarga se le agregaban las especias como vainilla, ají, canela o esencias de limón y naranja.
Hoy día la masa de cacao se calienta solo para hacerla fluida y apenas alcanzada cierta temperatura (35/40º) se le agrega el azúcar. El preparado se mantiene a una temperatura tal que el azúcar no se disuelve. Es la llamada técnica “en frío”.
La excelencia del producto radica en la simplicidad de elaboración y en la ausencia de manteca. Tampoco contiene sustancias como grasas vegetales, lecitina o leche. La única sustancia grasa es su propia manteca de cacao.

Aspecto y textura del chocolate de Módica
Módica
El color del chocolate es oscuro y opaco, debido a la ausencia de manteca que es la que le da brillantez. Tiene una apariencia rústica y da la impresión de romperse cuando uno lo toma entre los dedos.
Cuando se muerde se pueden ver los granitos de azúcar sin disolver, lo que le da una particular luminosidad y una textura granulosa al paladar.
Es altamente digerible, mucho menos graso que el chocolate industrial y sobre todo se saborea el verdadero gusto del chocolate genuino, que queda en la boca alargando el placer.
Estas son las características que lo diferencian del resto de los chocolates, haciéndolo original y único en su género.

En el 2010, el chocolate de Módica ha sido reconocido por el parlamento europeo como producto IGP, en reconocimiento a la calidad y excelencia de un producto que respeta la tradición y la historia.

Villa Igiea: el estilo Liberty en Palermo


A fines del ‘800 Palermo, la capital siciliana, es centro de actividad económica internacional. La ciudad tiene una intensa vida mundana y los protagonistas son soberanos y príncipes que llegan de varios países europeos. Palermo se convirtió en la capital del estilo Liberty y en punto de referencia de la aristocracia y la alta burguesía europea.
 
Desde el 1900 Villa Igiea es el hotel más prestigioso de Palermo, encargado por IgnazioFlorio al arquitecto Ernesto Basile, protagonista del Modernismo italiano. La idea inicial fue realizar un lujoso centro de talasoterapia, por lo que Florio compró Acquasanta, una vasta región con una vista incomparable, un extenso jardín que desciende hacia el mar y la fuente Acqua Santa, con milagrosas capacidades terapéuticas. El nombre Villa Igiea proviene de Hygiea, diosa de la salud. El proyecto original de sanatorio de lujo fue abandonado rápidamente y cambiado por la construcción de un gran hotel, redituable económicamente, dirigido a una elite de visitantes.

La fachada exterior del edificio se presenta austera y no parecería responder al estilo Art Nouveau. Las líneas rígidas se moderan con los ornamentos del pórtico con motivos típicos de ‘400 siciliano, con la adopción de arcos sostenidos por columnas y voluptuosos capiteles. El jardín fue proyectado siguiendo dos modelos: uno italiano y otro inglés. El italiano propone una escenografía del jardín alla italiana, con un escalón que lleva a un nivel inferior, caracterizado por la presencia de una pileta de agua que conduce al balcón sobre el mar con vista al golfo de Palermo. El modelo inglés se presenta con senderos sinuosos, prados y canteros.

La monumentalidad externa deseada por Ignazio Florio, es mitigada en el interior con un estilo formalmente Art Nouveau, quedando plasmado en el diseño de muebles  y decoraciones con elementos florales que constituyeron el signo distintivo del estilo Liberty.

domingo, 25 de diciembre de 2011

Ragusa y Ragusa Ibla: Patrimonio de la Humanidad

Catedral Ragusa Ibla
La provincia de Ragusa es la más pequeña de las nueve provincias de Sicilia. Se encuentra al S.E. de la isla, sobre el mar Mediterráneo.
El complejo urbanístico de la ciudad de Ragusa, capital de la provincia, se caracteriza por poseer dos centros históricos, originados después del terremoto de 1693. Hasta esta fecha la enfiteusis había favorecido el nacimiento de una nobleza que competía en la construcción de villas, palacios e iglesias en el intento de afirmar el propio prestigio. Después del trágico terremoto, disputas religiosas y sociales llevaron  a los devotos de San Giovanni y a los de San Giorgio a edificar, los primeros, una nueva ciudad sobre el altiplano, en la localidad de Patro, entorno a la nueva iglesia de San Giovanni. Mientras Ibla fue construida en el mismo lugar de la precedente, conservando la planta urbanística medieval, y la presencia de clases nobles favorecieron la construcción de palacios, iglesias e importantes monumentos. Ragusa Ibla (inferior) conserva gran parte del patrimonio barroco y Ragusa (superior) es una ciudad moderna y desarrollada.

La típica gastronomía siciliana: historia y tradición



La estratégica ubicación geográfica de Sicilia, en el centro del Mediterráneo, ha favorecido el encuentro de distintas civilizaciones. El buen clima, la fertilidad del terreno y los mares ricos en peces han inspirado una particular mezcla de ingredientes locales e importados, que dieron lugar a una gastronomía con huellas de las diversas culturas que la han poblado.


Elementos básicos de la cocina siciliana
Caponata
Los ingredientes principales son vegetales y pescados. En la cocina siciliana se usa exclusivamente el aceite de oliva extravirgen, tanto para cocinar como para condimentar. La sal es siempre marina, los platos son condimentados con hierbas aromáticas que crecen en abundancia: albahaca, perejil, menta; junto con pasas de uva, pan rallado tostado, cáscara de naranja y jugo de limón. Muy utilizados son las almendras, avellanas y pistachos, ya sea en la preparación de dulces y bebidas, como para condimentar el arroz y las pastas.
Se consume mucho pan, acompaña todos los platos y es frecuentemente horneado en horno de barro y consumido fresco. En la isla se encuentran numerosas variedades de pan.

La huella de los distintos pueblos en la cocina de Sicilia
Sobre la mesa impregnada de historia gastronómica, los griegos utilizaron las aceitunas verdes y negras, el cordero asado y, sobre todo, el vino. Góticos y Bizantinos gozaron de quesos picantes, salsas con atún y perfumados dulces. Los árabes hicieron uso del cuscús, la cassata y el sorbete. Con los españoles llegaron a la mesa siciliana el tomate, la caponata, la pasta con hinojo selvático, pan de España y chocolate.


Cassata
La gastronomía siciliana es realizada con productos que, llegados desde los puntos más lejanos, han encontrado en la isla un ámbito natural, gracias a la capacidad de inventiva de los sicilianos y al clima agradable que reina en Sicilia.
Un paraíso de la naturaleza, como bien dijo Ibn Zaffir, poeta de la corte de Federico II, quien afirmó:


“En Sicilia los árboles tienen fuego en las hojas y agua en las raíces”


miércoles, 21 de diciembre de 2011

Sicilia, corazón del Mediterráneo

Sicilia, la mayor isla del Mediterráneo se presenta al visitante como una tierra de bellezas y fascinantes contrastes. Tierra de ásperas montañas y de dulces playas, de solitarios pueblos de montaña y de ciudades llenas de gente, de humildes casas de pescadores y de inmensos opulentos palacios. Los antiguos griegos, refinados conocedores del mundo, la amaron y se asentaron, llamándola “Trinacria”, es decir, tierra de las tres puntas, resaltando su geométrica perfección.

Era ese el momento de tierra fértil, productivo suelo vulcánico, soleada y templada, llamada por mucho tiempo “cuna de la civilización”. La Sicilia aparecía como una isla adaptable a cada pueblo che quisiese vivir en un ambiente agradable y hacer florecer la propia civilización. Y en efecto cada pueblo ha dejado su huella: desde los griegos a los “imperialistas” romanos, desde los vivaces y cultos árabes a los dinámicos normandos, desde los “intelectuales” nórdicos al paréntesis francés y a la larga y somnolienta dominación española.

Todas estas presencias históricas son evidentes con mayor o menor intensidad en esta amalgama que es el pueblo siciliano, en el modo de vivir, en el arte, hasta en el color de los ojos y la piel de la gente. Siglos de problemas, atraso, miseria y abandono, no descalifican la profunda fascinación que produce esta tierra, que no es sólo azhares, Etna sugestivo o mar límpido, sino su profunda belleza que emana desde los ángulos menos conocidos de este “corazón del Mediterráneo”.

A Sicilia se adapta mejor que a cualquir otra región de Italia el apelativo de desconocida; es un sistema de islas contenido en una isla y moviéndose entre estas islas se encuentran las diversas Sicilias, sorprendentes por la variedad de razas humanas, culturas y paisajes.

En la isla el turista tiene que tener paciencia y saber buscar. Paciencia y perseverancia serán premiadas porque pocos lugares en el mundo saben dar emociones tan fuertes para finalmente hacerse amar profundamente.

lunes, 19 de diciembre de 2011

Mercadillos de Navidad

Entre pesebres vivientes, novene (preparación de las fiestas por nueve días consecutivos) y zampognari (personas que tocan la zampogna, instrumento musical de viento), la Navidad en Sicilia mantiene una connotación popular, ligada a antiguas tradiciones campesinas y artesanales de la isla.

Pero desde hace algunos años, junto a las manifestaciones religiosas, se han comenzado a afirmar nuevas ideas e iniciativas culturales propias de la Italia del norte, en donde la Navidad es sinónimo de mercados navideños. Puestos callejeros y pequeños stands han colmado plazas y calles de muchas ciudades y pueblos sicilianos.

En los mercados navideños se venden artesanías regionales, productos autóctonos (vinos, quesos y aceites), variados turrones y dulces típicos como lo son las masitas de almendras, avellanas o pistachos. No faltan los Papás Noel de todos los tamaños, sobre todo, los que “trepan por los balcones”. Son Papás Noel que simulan estar subiendo por una escalera y llegando a los hogares.
La estrella federal o stella di Natale es la flor que más se ve en estos días; rojas y amarillas cubren veredas y negocios. Los negociantes realmente se esmeran en la decoración de veredas y vidrieras. Las hay hasta con escenografías mecánicas en miniatura que representan paisajes típicos navideños.
La Navidad en Sicilia es una fiesta para pasar en familia, mientras que el Año Nuevo es habitual pasarlo con amigos. Hay una conocida frase siciliana que dice “Natale con i tuoi, Capodanno con chi vuoi”.

¡Feliz Navidad para todos! Buon Natale!

domingo, 18 de diciembre de 2011

El volcán Etna

El volcán Etna de Sicilia ha sido incluido en el listado propositivo de sitios naturales, primer paso para aspirar a ser Patrimonio Mundial de la Humanidad.

El volcán italiano Etna, con sus 3.350 metros, es el volcán activo más alto de Europa. El Etna tiene actividad desde tiempos inmemoriales; fue conocido y observado por griegos y romanos y en la actualidad es uno de los volcanes más famosos y visitados del mundo.

Qué es el listado propositivo de la Unesco, en el cual ha sido incluido el volcán Etna de Italia
El listado propositivo o tentative list es un registro provisorio de sitios que cada Estado miembro presenta al Centro del Patrimonio Mundial para señalar los bienes naturales o culturales que pretenden ser candidatos a la nominación de la Unesco.

Condiciones que cumple el volcán Etna de Sicilia para estar incluido en la lista
Las candidaturas deben demostrar el valor universal del sitio, cuyas características lo hacen bien único. Es necesario ilustrar las condiciones de integridad y autenticidad, además de estar tutelados adecuadamente. Deben, también, superar un análisis comparativo realizado con bienes análogos nacionales e internacionales.

El Etna con valor universal de “único”
El volcán Etna ha erupcionado muchas veces en la historia humana y por la intensidad y la persistente actividad volcánica ha generado mitos, leyendas y observaciones naturales desde las épocas clásicas griega y romana.
Durante los períodos de fuertes erupciones, la lava fluye de centenares de cráteres. La intensidad del fenómeno es variable y las efusiones de lava pueden durar pocas horas, meses o años.
El Etna es el mejor laboratorio natural de la región biogeográfica del Mediterráneo, por los procesos ecológicos y biológicos en curso, por la población animal, las estrategias de vida y las dinámicas para la reutilización del ambiente y los efectos de fragmentación del hábitat.

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sábado, 17 de diciembre de 2011

Catania: turismo a los pies del volcán Etna


El mar azul de Catania y la roca lávica
La ciudad siciliana de Catania impacta con el azul del mar en contraste con el negro de la lava volcánica y todo el color de la vegetación mediterránea.

Catania es una ciudad poliédrica, llena de vida, de día y de noche, ofrece una espléndida escenografía de iglesias y palacios barrocos, un ambiente lírico-literario con museos y teatros y una frenética movida de los locales de moda.

Catedral de Catania
Es un activo centro comercial y económico, con importante producción agrícola, una moderna y creciente zona industrial y un puerto, que por sus dimensiones, es el segundo de Sicilia.
Goza de un excelente clima, tanto en invierno como en verano, lo que la transforma en meta turística todo el año.

Qué hacer en Catania: opciones turísticas
Teatro Bellini
No importa si el viaje a Catania se hace solo, en pareja, en grupo o en familia. Es una ciudad que ofrece posibilidades para todos los gustos y los bolsillos.
Si se es amante del arte y la arquitectura, basta sólo con recorrer a pie el centro histórico, muestra al aire libre del barroco del 700. La mayoría de los edificios fueron construidos o reconstruidos sobre la lava, después de la más grande erupción del volcán Etna, en el año 1669. En el 1693 un fuerte terromoto volvió a destruir todo, o casi todo. 
La plaza central, la catedral, la Universidad, el teatro Bellini y todos los edificios cercanos conservan ese majestuoso estilo barroco. Pero es la calle Cruciferi la meta de los que gustan de la arquitectura.

Via Cruciferi: emblema de Catania
Es la calle en donde las dominaciones de varias civilizaciones han dejado sus huellas. Está “encerrada” entre dos arcos. A derecha e izquierda se suceden iglesias, monasterios y magnificas escalinatas, todo exaltado por el juego de luces y sombres que les confiere la piedra lávica.